En los primeros tres años de vida hemos realizado numerosos eventos que más o menos siempre respondían a la misma agenda, aunque variando los protagonistas.

Por un lado, para laJornada Mundial de las Comunicaciones Sociales, reflexionamos con profesionales de los medios de comunicación sobre la importancia que siempre ha dado laIglesia al trabajo profesional de los periodistas y demás comunicadores.

 

También nos hemos ocupado de la pobreza y la inclusión social, dando visibilidad a muchas organizaciones sociales que trabajan en el llamado tercer sector por los que más sufren y lo necesitan. Así hemos conocido experiencias tan valiosas como “Los Espartanos”, que, desde el mundo del rugby, se ocupan de la rehabilitación de los presos.

 

 

 

 

 

 

O los “Paya Cristos”,que llevan el consuelo y el buen humor a los niños que sufren internados en las salas de hospitales.

 

También el caso de la experiencia del “Buen Samaritano”, que se ocupa de la atención a los enfermos terminales.

 

 

 

 

 

Ha sido un honor contar con el fundador de CONIN, el Doctor Abel Albino, que trabaja por disminuir de modo estructural la pobreza que ocasiona el hambre en los momentos fundamentales de la vida humana; y con la querida Margarita Barrientos, que desarrolla con sus comedores un invalorable trabajo de asistencia a los más pobres de nuestra sociedad.

 

También en este campo de la pobreza y la inclusión social hemos contado con la ayuda de la organización TECHO, que se ocupa del justo acceso a la vivienda, algo que debería ser un derecho humano fundamental.

 

En el curso de estos años, también nos hemos ocupado con expertos del flagelo de las adicciones y de la misericordiosa aproximación humana que tiene que hacerse a nivel Iglesia y sociedad en general.

 

 

Como profundizaremos luego en un apartado especial, el diálogo interreligioso y el ecumenismo han sido una constante a la que hemos dedicado nuestros mejores esfuerzos en cada fin de año, convencidos de que la convivencia en la diferencia es posible.

 

Asimismo, y para concluir este capítulo de eventos presenciales, no podemos olvidar las “acciones sociales” concretas que hemos realizado en colaboración con otras organizaciones para asistir a la pobreza que requería urgente atención tanto en Neuquén como en la Capital Federal.